¿Cómo saber qué carrera estudiar?

Elegir qué carrera estudiar es una decisión tan importante que no debe ser tomada a la ligera, pues requiere la realización del análisis de varios aspectos antes de tomar esta decisión, ya que generalmente de ella va a depender la calidad de la vida laboral y profesional en el futuro.

Hay muchas personas que eligen la carrera universitaria por razones muy diferentes a lo que realmente les interesa o les resulta apasionante, provocando la mayoría de las veces que terminen frustradas, deprimidas e insatisfechas.

Los motivos por los cuales muchas personas toman esta decisión aceleradamente son variados, existen razones económicas, presiones familiares, falta de interés, entre muchas más... Para evitarlo se deben considerar algunos aspectos.

Razones para estudiar una carrera universitaria

Muchos estudiantes deben tomar la decisión entre proseguir estudios en una carrera universitaria o enfocarse en buscar un empleo a tiempo completo y poder recibir mayores ingresos, descuidando el área académica.

A continuación, se indican las razones por las cuales es importante tomar todas las previsiones a fin de poder continuar cursando estudios en una carrera universitaria.

Posibilidad de encontrar un mejor trabajo

La probabilidad de adquirir un empleo que favorezca el crecimiento laboral para una persona que haya concluido una carrera de educación superior es mucho mayor que la de aquellos que no cursaron la educación universitaria.

Los empleadores le asignan mucho valor a sus recursos humanos cuando cuentan con una carrera universitaria y si demuestran, además, un desempeño académico excelente, su relevancia es mayor. Esto obedece a que la competencia en el campo profesional es excesiva debido a la gran oferta de profesionales y a la escasa demanda de los mismos.

Oportunidad de mejores sueldos

Un sueldo atrayente es resultado directo de la oportunidad de desempeñar un mejor empleo. Los egresados de las universidades pueden recibir sueldos más altos cuando inician su desempeño en las empresas y también disfrutan de mayores ventajas en los casos de promoción a cargos gerenciales y de dirección, logrando así escalar posiciones en las estructuras empresariales.

Impulso en el crecimiento personal

Haber logrado una carrera universitaria abre las puertas para el crecimiento personal, además de los beneficios que trae en el sector laboral. Todas las exigencias académicas fomentan la optimización de los hábitos de estudio y la capacidad de llevar a cabo los esfuerzos necesarios para cumplir las metas.

Todo esto causa que gradualmente se vayan fortaleciendo la disciplina y la manera de afrontar los problemas, por lo que se impulsa el crecimiento personal y emocional.

La experiencia de una vida universitaria

La experiencia de vivir una etapa universitaria presenta la oportunidad de experimentar una variedad de actividades fuera de las aulas que favorecen el desarrollo social y emocional de las personas. Esto se logra mediante la integración a equipos deportivos, grupos artísticos y culturales, entre otras actividades extracurriculares.

Satisfacción de trabajar en lo que apasiona

El hecho de haber culminado una carrera universitaria hace posible que se pueda orientar la carrera profesional hacia las áreas que más sean de interés. Estudiar algo que apasiona y luego dedicarte a eso proporciona una satisfacción mayor que ganar dinero en otras áreas. Por eso es muy importante escoger bien qué carrera estudiar y poder identificar la proyección de esa profesión en el ámbito laboral.

Áreas de estudios superiores

Las carreras universitarias se pueden clasificar en cinco grandes áreas, las cuales son:

Ciencias Sociales y Jurídicas

Las carreras de Ciencias Sociales y Jurídicas se encargan de estudiar al hombre como objeto social y a su entorno. Algunas de esas carreras relacionadas con las ciencias sociales son:

• Administración y Dirección de Empresas.
• Derecho.
• Publicidad y Relaciones Públicas.
• Magisterio.
• Trabajo Social.
• Psicología.

Estos grados están orientados a aquellas personas con una marcada sensibilidad social y de justicia. Otros aspectos que les distinguen son su capacidad para expresarse en público, su interés en el entorno, su capacidad para el análisis y para la negociación, además se caracterizan por su sentido crítico, memoria y creatividad.

Artes y Humanidades

Las carreras de este grupo tienen por finalidad el estudio del conocimiento del hombre, así como sus orígenes y sus diferentes culturas. En este grupo algunos de los estudios que se pueden encontrar son:

• Creación Artística.
• Literatura.
• Filosofía.
• Filología.
• Traducción e Interpretación.

Los rasgos de las personas que estudian estas carreras son la destreza manual, la sensibilidad musical, la capacidad literaria, la creatividad, una buena memoria visual y auditiva, la percepción y la capacidad de síntesis.

Ciencias de la Salud

Se agrupan en este renglón aquellos estudios que se relacionan directamente con la salud:

• Medicina.
• Enfermería.
• Nutrición y Dietética.
• Odontología.
• Farmacia.
• Fisioterapia.
• Veterinaria.

Las características de las personas que prefieren estas carreras son: tolerancia, capacidad de oír, responsabilidad, empatía, buen trato con la gente, memoria y aptitud de servicio, además de contar con un interés por los trabajos de investigación.

Ciencias

Comprenden los grados que están relacionados con las ciencias, como:

• Matemáticas.
• Física.
• Química.
• Biología.
• Ciencias Ambientales.
• Geología.

Las personas con inclinaciones hacia estas profesiones deben poseer un razonamiento lógico, destreza para elaborar cálculos, contar con rigurosidad, orden y pensamiento analítico; además de demostrar interés por la investigación y por las nuevas tecnologías.

Ingeniería y Arquitectura

Comprende todas las profesiones que tienen su fundamento en la aplicación de estudios técnicos, como:

• Arquitectura.
• Ingenierías.
• Aeronáutica.
• Topografía.
• Informática.
• Edificación y Obra Civil.
• Diseño Industrial.

Las características que poseen las personas de estas profesiones son la aptitud numérica, una buena inteligencia espacial, tener razonamiento lógico, capacidad de abstracción; contar con una mentalidad analítica y un buen sentido de la orientación.

Elección de la carrera a estudiar

En el proceso de elegir una carrera universitaria se puede considerar la realización de tres fases o etapas para cumplir con el objetivo, las cuales son:

• Evaluación de las características personales: Se trata de tomar en cuenta la totalidad de los aspectos personales de la persona a fin de determinar con precisión cuál es el área de conocimiento que más se adapta a sus intereses, preferencias y características personales.
• Selección ampliada de opciones: Consiste en identificar todas las opciones posibles de carreras según los resultados de la fase anterior, a fin de generar un esquema ordenado según las prioridades establecidas.
• Evaluación de opciones: En esta fase se evalúan las opciones seleccionadas hasta depurar la lista y establecer dos o tres carreras, las cuales se evalúan detalladamente hasta llegar a la decisión definitiva que permita determinar qué carrera universitaria estudiar.

Evaluación de las características personales

El primer paso de este procedimiento es investigar profundamente en el interior de uno mismo para encontrar cuáles son esas áreas del conocimiento que nos interesan y generan entusiasmo.

Así mismo, hay que analizar las habilidades con que se cuenta y en qué ámbito se tienen debilidades, además de identificar las destrezas que se desea ir adquiriendo o mejorando, estableciéndolas en un orden según la prioridad.

En general, los aspectos personales que deben ser evaluados se indican a continuación:

• El carácter: Establecer las características particulares de la persona permiten ubicar las alternativas de estudios y las profesiones más adecuadas.
• Las fortalezas y las debilidades: Se trata de identificar las cualidades más resaltantes de la persona y en cuáles se debe intentar mejorar, con el fin de encontrar un sector de estudio que se adapte.
• Las materias de estudio: Por medio del conocimiento de aquellas materias o asignaturas que fueron más interesantes para el futuro estudiante y aquellas que no le llamaron tanto la atención se puede encontrar el área de conocimiento de interés para él.
• Los intereses y las aficiones: Muchas veces una afición puede convertirse en una carrera profesional exitosa. Por ello, es necesario evaluar los asuntos que son de nuestro interés.
• Los valores: Para elegir una carrera es necesario llegar a conocer qué elementos son más valiosos para la persona (ayudar a otros, el dinero, viajar frecuentemente, entre otros).
• Las pasiones: Descubrir ese tema o asunto que apasiona puede ser clave en el momento de elegir una profesión.
• El tipo de trabajo ideal: Es importante identificar el tipo de trabajo ideal para el futuro estudiante (de oficina, al aire libre, atendiendo gente, entre otros).

Con estos aspectos ya evaluados se pueden utilizar algunas herramientas con el fin de depurar la información obtenida e ir determinando de manera general el campo del conocimiento dónde investigar con mayor detalle.

Algunas de esas herramientas de utilidad son:

• Hacer listas y establecer un orden: Elaborar listas de cada tema planteado, fortalezas, debilidades, valores, pasiones, materias, y a cada una ordenarlas por prioridad o según escalas.
• Apoyarse en un test de evaluación: Existe una diversidad de pruebas que analizan la personalidad y los intereses con el fin de recomendar las carreras a tomar en cuenta para estudiar en el futuro.

Después de esta primera fase, se debería tener como resultado una estimación de las áreas de conocimiento hacia donde las características personales del estudiante se inclinan, entonces viene la fase de evaluar entre las carreras que comprenden esas áreas.

Selección ampliada de opciones

Cada vez la variedad de carreras universitarias disponibles se hace más extensa, por lo que se dificulta la toma de una decisión; sin embargo, también trae la ventaja de permitir encontrar una profesión más adecuada a los rasgos personales dentro del amplio rango de opciones posibles.

Algunos de los elementos que se deben considerar para utilizar como apoyo al momento de llevar a cabo una investigación más minuciosa son los siguientes:

• Averiguar más allá de los nombres conocidos. Hoy en día existen muchas carreras que por ser novedosas no son de las más conocidas y puede pasar que se tome una decisión errada por desconocimiento de las opciones disponibles actualmente.
• Pedir orientación profesional. Un valioso recurso es apoyarse en los orientadores vocacionales, puesto que son profesionales con la información adecuada, que muchas veces están a la disposición en la escuela secundaria o instituto.
• Consultar a familiares y amigos con experiencia. Por medio de los contactos de primera mano, como amigos y familiares, se puede establecer contacto con profesionales de esas carreras sobre las que se desea investigar.
• Acudir a las universidades que imparten los estudios que más te interesan. Con la finalidad de tomar toda la información posible de primera mano, conversar con estudiantes de las carreras de interés acerca de los detalles académicos de las mismas.
• Investigar opciones desconocidas. También se debe averiguar sobre esas carreras o estudios de los cuales no se tiene mucha información para evaluar la posibilidad de considerarlos como opciones.
• Averigua en Internet. Este es un recurso excelente para buscar la mayor cantidad de información sobre cualquier carrera. Existen blogs y páginas especializadas en carreras universitarias.
• Asistir a las ferias universitarias. Muchas instituciones organizan ferias donde suministran información sobre las carreras profesionales que tienen disponible en su oferta académica. Es una buena herramienta para aprender sobre carreras desconocidas y para profundizar más en las que se conocen.

Además de emplear estas herramientas para buscar la mayor cantidad posible de información sobre las carreras de interés, estas recomendaciones se pueden tomar en consideración a la hora de evaluar las ofertas:

• No dejarse influenciar por opiniones generales. Aunque se recomienda prestarle atención a la opinión de los demás, la decisión a tomar siempre será muy personal y para cada caso particular serán diferentes las circunstancias.
• No dejarse llevar con la moda. En ocasiones una determinada carrera se vuelve tendencia por variadas razones y esto influye bastante en la selección definitiva, si no se tiene la madurez de evadir este factor en la toma de decisiones.

Al finalizar esta etapa el resultado debe ser una lista amplia de opciones con todas las consideraciones posibles, incluyendo carreras novedosas y hasta desconocidas.

Evaluación de opciones

Ya con la lista de carreras hecha, se deben evaluar cada una para depurar ese listado e irse quedando con menos opciones hasta llegar a unas dos o tres, que se deben valorar repetidamente hasta poder tomar la decisión definitiva.

Entre los aspectos que ahora se deben considerar para lograr obtener una opción elegida de manera definitiva, están las siguientes:

• La duración de la carrera. Es un aspecto muy importante porque depende del tiempo planificado por la persona para su ingreso al campo laboral. La diversidad de carreras y de los tiempos de duración de las mismas hace necesaria su evaluación.
• La dificultad de los estudios. Es conveniente tener una idea de este aspecto, ya que debe adecuarse con anticipación al esfuerzo que la persona esté en capacidad de realizar para cursar la carrera.
• El enfoque académico. La profesión elegida debe buscarse con un enfoque que se adapte mejor a la preferencia personal, existen carreras universitarias que están más orientadas a la teoría que a la práctica y viceversa.
• La relevancia de los idiomas. Hay profesiones que en su plan de estudios incluyen la posibilidad de obtener un nivel aceptable en algunos idiomas de uso global, lo cual representa un extra adicional a la carrera que debe ser considerado.
• Las salidas laborales. Es interesante conocer las salidas laborales que tiene una carrera determinada, antes de tomar la decisión final. Mientras más diversas sean las salidas laborales habrá mayor versatilidad en el desarrollo de la profesión.
• El costo asociado. Es necesario evaluar la capacidad para cubrir económicamente la carrera o la de buscar fuentes de financiamiento como becas, créditos, préstamos, entre otras; para ello, se deben analizar los gastos de matrícula y también los asociados a la comida, alojamiento, viajes, entre otros.
• Las prácticas. En la actualidad, las prácticas constituyen el acceso primario al sector laboral. Por ello, la escogencia de carreras que permitan lograr una formación práctica adecuada al culminar los estudios, es un aspecto resaltante de este análisis.
• La facilidad de encontrar empleo. Existen estudios que ofrecen al egresado más posibilidades para obtener empleo que otros. Es un factor que va a servir para preparar el esfuerzo y la estrategia a desarrollar con el fin de obtener el ingreso a un puesto de trabajo.
• El plan de estudios de la institución. Los planes de estudios de una misma carrera suelen ser diferentes según el enfoque académico que tiene cada institución, por ello es importante conocer el programa específico de cada universidad para el grado que se desea estudiar.
• Evaluar estudios complementarios a la carrera. Existen carreras universitarias donde en el plano laboral además del título de grado obtenido se requiere contar con conocimientos adicionales en otras áreas, para los cuales también hay que formarse y considerarlos a la hora de decidir.
• Los recursos y la organización de la universidad. Se debe evaluar el prestigio de la institución, la calidad del profesorado, las instalaciones, la planificación y organización de los cursos, entre otros temas, con el fin de no vivir decepciones después de iniciada la carrera.
• El tamaño y la ubicación geográfica de la universidad. Esto va a depender de las preferencias que se tengan para cursar los estudios, si es mejor un centro educativo pequeño o uno de mayor tamaño, así como si se prefiere estudiar en una institución retirada de la ciudad de residencia o en una ubicada más cerca.

En conclusión, para elegir de la manera correcta qué carrera estudiar es necesario, en primer lugar, llevar a cabo una evaluación personal para orientarse hacia las áreas donde se encuentran las profesiones más interesantes. Luego se debe recopilar información sobre todas las opciones posibles para, finalmente, proceder a su análisis minucioso y detallado, hasta encontrar una opción de carrera profesional que se adapte a los gustos y objetivos individuales.