La formación de la Monarquía Hispánica y su expansión mundial (1474-1700) - Bloque 3 EBAU 2024
La etapa que abarca desde 1474 hasta 1700 representa un período trascendental en la historia de España, marcado por la formación y expansión de la Monarquía Hispánica, un vasto imperio que dejó una huella duradera en la historia mundial. A lo largo de este bloque, exploraremos los acontecimientos clave que llevaron a la consolidación de este poderoso imperio y su proyección a nivel global.
Los Reyes Católicos: unión dinástica e instituciones de gobierno
El inicio de esta etapa se encuentra en el reinado de los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón, cuyo matrimonio en 1469 unificó dos de las principales coronas de la Península Ibérica. Esta unión dinástica sentó las bases para la creación de la Monarquía Hispánica, un Estado centralizado y poderoso.
Durante su reinado, los Reyes Católicos establecieron instituciones de gobierno que fortalecieron el poder real y sentaron las bases para una administración más eficiente. El Consejo Real, encargado de asesorar al monarca en asuntos de gobierno, y la creación de corregimientos y audiencias, contribuyeron a la estabilidad política y administrativa.
Además de sus logros en el ámbito interno, los Reyes Católicos también llevaron a cabo la Reconquista, que culminó con la conquista del Reino de Granada en 1492, poniendo fin a casi ocho siglos de dominio musulmán en la Península.
El significado de 1492. La guerra de Granada y el descubrimiento de América
El año 1492 representa un punto de inflexión en la historia de España y del mundo. En enero de ese año, los Reyes Católicos lograron la conquista del Reino de Granada, culminando así la Reconquista y estableciendo la supremacía cristiana en la Península Ibérica.
Pocos meses después, en octubre de 1492, Cristóbal Colón, financiado por los Reyes Católicos, llegó a América. El descubrimiento del Nuevo Mundo abrió nuevas rutas comerciales y estableció un vasto imperio colonial que amplió los dominios de la Monarquía Hispánica a tierras desconocidas.
El año 1492 también fue significativo por la expulsión de los judíos sefardíes de España, lo que supuso una pérdida importante para la cultura y economía del país.
El Imperio de los Austrias: España bajo Carlos I. Política interior y conflictos europeos
Tras la muerte de los Reyes Católicos, su nieto Carlos de Habsburgo ascendió al trono como Carlos I de España y V de Alemania. Su reinado estuvo marcado por un vasto imperio que abarcaba territorios en Europa, América y Asia.
Carlos I enfrentó desafíos en la política interior debido a la diversidad de reinos y territorios que componían la Monarquía Hispánica. Para mantener la unidad del imperio, Carlos I tuvo que negociar y ceder a las demandas de los diferentes reinos y regiones.
Además, Carlos I se vio involucrado en conflictos europeos, como las Guerras Italianas y las Guerras de Religión en Alemania, que agotaron los recursos del imperio y pusieron a prueba su capacidad de liderazgo.
La Monarquía Hispánica de Felipe II. Gobierno y administración. Los problemas internos. Guerras y sublevación en Europa
El reinado de Felipe II, hijo de Carlos I, fue una época de consolidación y expansión para la Monarquía Hispánica. Felipe II mantuvo una estructura centralizada y burocrática de gobierno, con el Consejo de Estado y el Consejo de Hacienda como órganos clave.
En el ámbito interno, la Monarquía Hispánica enfrentó problemas, como la rebelión de los moriscos en el Reino de Granada, que buscaban preservar su cultura y religión tras la expulsión de los judíos.
En el ámbito externo, España se involucró en conflictos como la Guerra de los Ochenta Años contra los Países Bajos y la Armada Invencible contra Inglaterra. Aunque estas campañas militares tuvieron un costo significativo para el imperio, también buscaban mantener la hegemonía de España en Europa.
Exploración y colonización de América. Consecuencias de los descubrimientos en España, Europa y América
La exploración y colonización de América representaron uno de los episodios más trascendentales de la historia mundial. Los viajes de exploración de Cristóbal Colón y otros navegantes españoles abrieron nuevas rutas comerciales y establecieron un vasto imperio colonial.
El intercambio cultural entre Europa y América tuvo un profundo impacto en ambas regiones. La introducción de nuevos alimentos y productos en Europa, como el maíz y la patata, revolucionó la dieta y contribuyó a la mejora de la demografía.
La riqueza obtenida de las colonias americanas, principalmente en forma de metales preciosos, como el oro y la plata, fortaleció la economía del imperio y financió sus guerras y empresas coloniales.
La colonización también tuvo consecuencias negativas para las poblaciones indígenas de América, quienes sufrieron la explotación y enfermedades traídas por los europeos, lo que provocó una disminución drástica de su población.
Los Austrias del siglo XVII: el gobierno de validos. La crisis de 1640
El siglo XVII estuvo marcado por el gobierno de los Austrias en España. Durante este periodo, se produjo un predominio de validos, personas de confianza del monarca que ejercían una gran influencia en la toma de decisiones.
En este contexto, los reinados de Felipe III, Felipe IV y Carlos II se caracterizaron por una gestión gubernamental en la que validos como el Duque de Lerma, el Conde-Duque de Olivares y la Reina Mariana de Austria jugaron un papel destacado.
La influencia de los validos fue objeto de controversia, ya que su poder podía desembocar en una concentración excesiva de autoridad y en una política que no siempre beneficiaba a los intereses del país.
La crisis de 1640 representó uno de los momentos más complicados para la Monarquía Hispánica. Portugal, hasta entonces parte del imperio, se rebeló y declaró su independencia, lo que supuso la pérdida de uno de los territorios más ricos y estratégicos del imperio.
La guerra de los Treinta Años y la pérdida de la hegemonía española en Europa
A mediados del siglo XVII, España se vio involucrada en la Guerra de los Treinta Años, un conflicto que se libró principalmente en Europa Central y que tuvo graves repercusiones para la Monarquía Hispánica.
La guerra, que tuvo lugar entre 1618 y 1648, enfrentó a católicos y protestantes, así como a diversas potencias europeas. España, alineada con los católicos, se involucró en el conflicto para defender los intereses de la Iglesia Católica y su hegemonía en Europa.
Sin embargo, la guerra resultó costosa y debilitó la economía y el ejército español. Además, España sufrió varias derrotas militares, lo que llevó a una pérdida gradual de su influencia política y territorial en Europa.
Principales factores de la crisis demográfica y económica del siglo XVII y sus consecuencias
El siglo XVII fue un periodo de crisis demográfica y económica para la Monarquía Hispánica. La población española sufrió un declive significativo debido a diversas causas, como las guerras, las epidemias y la emigración a América.
La economía española también enfrentó dificultades, ya que la explotación de las colonias americanas llevó a una dependencia excesiva de los metales preciosos y a un escaso desarrollo en otros sectores económicos.
Además, las constantes guerras y la ineficiente administración contribuyeron a una situación de endeudamiento y una crisis financiera en el imperio.
Como consecuencia de esta crisis, España perdió influencia en Europa y su hegemonía como potencia mundial comenzó a declinar.
Crisis y decadencia de la Monarquía Hispánica: el reinado de Carlos II y el problema sucesorio
El reinado de Carlos II, último monarca de la dinastía de los Austrias, estuvo marcado por la crisis y la decadencia de la Monarquía Hispánica.
Carlos II ascendió al trono en 1665 y su reinado estuvo marcado por una serie de problemas, tanto políticos como económicos. La falta de un heredero directo y la debilidad física y mental del monarca generaron incertidumbre sobre la sucesión al trono.
Además, durante el reinado de Carlos II, la situación económica del imperio continuó deteriorándose, con una creciente deuda pública y una disminución de los ingresos provenientes de las colonias americanas.
La crisis política y económica de la Monarquía Hispánica, sumada a la decadencia de la dinastía de los Austrias, allanó el camino para el surgimiento de la Guerra de Sucesión Española, que marcaría el fin de la hegemonía española y el inicio de una nueva era en la historia de España. A pesar de los desafíos y crisis que enfrentó, el legado de la Monarquía Hispánica dejó una profunda huella en la historia de España y en la configuración del mundo moderno.
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